El embarazo es una de las épocas más importantes y bellas en la vida de una mujer y es el único momento, aparte de su propia infancia, que el cuerpo cambia tan drásticamente en tan poco tiempo.
Hoy en día vemos muchas embarazadas con ansiedad. Están bombardeadas con información y no empoderadas, porque no les han enseñado a escuchar a su propio cuerpo y a tener confianza en lo que les dice.
Muchas veces les tratan como enfermas, pero, al contrario, su cuerpo está haciendo el proceso más exigente y magnífico que puede hacer un cuerpo humano: creer una nueva vida. Por eso, llevar una vida saludable durante el embarazo es lo más importante. Optimiza el organismo, maximiza el cuidado y aumenta el bienestar en una época de cambios tan grandes es esencial tanto para mamá y bebé.
Es posible que, en una época de tantos cambios, ellas se sientan más cansadas, pesadas e incómodas. Desafortunadamente, la ciática, el dolor de espalda o de cabeza, los problemas de sueño, las náuseas… son algunas de las molestias que las mujeres pueden experimentar cuando están embarazadas. Situaciones en este estado que la Quiropráctica ayuda a evitar o aliviar.
Como ya hemos dicho en otras ocasiones, lo más importante de la Quiropráctica no es tratar síntomas, sino cuidar el cuerpo para aumentar su bienestar, para que todo el organismo funcione mejor. Solo así, ayudando a todo el cuerpo y efectuando un cambio al nivel de todo el organismo, podemos ayudar a que no aparezcan o vuelvan los dolores.
De este modo, seguir un cuidado quiropráctico optimiza el cuerpo para que funcione mejor, y ayuda a eliminar las tensiones y el estrés que puedan existir en este nuevo estado y, en definitiva, redunda en el bienestar y la salud de la mujer.
La Quiropráctica es una buena herramienta, aunque bastante desconocida en España todavía, para ayudar a las embarazadas y madres primerizas a mantener su bienestar durante este proceso.
Si no están bajo un cuidado quiropráctico y están embarazadas, ahora es buen momento para comenzar. Siempre es buen momento para beneficiarse de la Quiropráctica, pero durante el embarazo notarán un gran alivio en la espalda, pelvis y otras articulaciones aumentando su bienestar. De hecho, muchas matronas y ginecólogas de Estados Unidos recomiendan el cuidado quiropráctico, aunque no haya dolor ni molestias.
Si ya están bajo un cuidado quiropráctico y están embarazada, no dejen de cuidarse con Quiropráctica para seguir manteniendo su bienestar. Además de aliviar las molestias típicas, hará que su cuerpo funcione correctamente.
El embarazo es una época bella y llena de cambios. Vivirla con energía, ganas, esperanza y salud depende de cada mujer. Y la Quiropráctica ayuda a la mamá y bebé a disfrutar de un embarazo como deseen.
Por qué deberían ir a un Quiropráctico durante el embarazo
Estar bajo un cuidado quiropráctico ayuda a mantener el equilibrio, la alineación y la flexibilidad de la columna y de la pelvis de la madre para vivir plenamente su embarazo. Como indica doctor Kevin Zimmerman, durante el embarazo se libera la hormona relaxina que relaja las articulaciones y facilita el parto. A veces, los ligamentos se aflojan tanto que aparecen molestias afectando a la columna y a su movilidad.
–Ayuda al proceso natural para que la mujer disfrute de un parto más fácil, más corto y más seguro. Según estudios, se puede reducir hasta en un 25% el tiempo de parto en el primer embarazo, y en un 31% en los sucesivos embarazos.
Al corregir las subluxaciones sacras se equilibran los músculos y ligamentos de la pelvis de la madre y se evita el “encierro”, permitiendo al bebé colocarse en la mejor posición para el parto. Tiene muy buenos resultados incluso cuando queda poco tiempo para dar a luz.
-Ayuda a optimizar la posición del bebé. Los bebés sienten lo que siente su madre. Si la madre está sana y relajada, el bebé estará cómodo durante su crecimiento y adoptará la mejor postura para el nacimiento. Según estudios hay una tasa de éxito del 82% en ayudar a al bebé colocarse correctamente. Conoce la técnica Webster.
-Mejora la calidad del sueño. La optimización del cuerpo gracias a la Quiropráctica ayuda a la futura mamá a dormir mejor y eso influye a la hora de dar a luz: las embarazadas que duermen menos de 6 horas tienen un promedio de 29 horas de parto; mientras que las mujeres que duermen 7 horas o más, el promedio es de 18 horas.
-Alivia los frecuentes dolores de espalda, lumbares, ciática y articulaciones sin medicamentos. El 90% de las mujeres experimenta mejoría en pocas sesiones.
-Alivia las náuseas. Los ajustes mejoran el funcionamiento del sistema nervioso, lo que puede ayudar con las náuseas.
–Ayuda en el posparto. La Quiropráctica ayuda a aliviar los dolores después de dar a luz y facilita la recuperación de la madre.
La Quiropráctica optimiza naturalmente el funcionamiento del sistema nervioso mejorando la salud en general.
Si tienes alguna duda, ponte en contacto con nosotros o habla con tu matrona o ginecóloga. Cada vez más embarazadas se benefician de la atención quiropráctica. Confía en nuestros cuidados quiroprácticos y vive plenamente tu embarazo.